Los mejores presentadores son contadores de historias. Capturan la atención de los asistentes desde la primera frase y la mantienen hasta que se bajan del escenario. ¿Cómo lograr esto?
Aquí tenemos algunos puntos importantes que debes tomar en cuenta para que tu presentación sea algo fuera de serie.
- Cuenta historias personales. Los relatos más fascinantes son los que revelan vulnerabilidad. Determina cuáles son los puntos que quieres destacar y cómo se relacionan con una experiencia que hayas tenido. Si logras esto son muchas las posibilidades de que tu audiencia se identifique contigo
- Trata de no preocuparte por revelar demasiado sobre ti. Entre más te abras, más real y convincente será tu historia. Tu audiencia sentirá contigo y comprará tu historia.
- Prepara tus primeras frases para capturar la atención de tu audiencia desde el primer momento. Platícales con pasión lo que encontrarán al final de la historia y no olvides los detalles conforme avanzas.
- ¿No sabes cómo empezar? Aplica el truco periodístico del tren. Éste consiste en sentirte que vas en un tren en marcha y tienes la posibilidad de entrevistar a un personaje que llegará a su destino en 15 minutos. ¿Qué dirías en los pocos minutos que tienes para comunicar tu mensaje? Escribe unas cuantas opciones que te ayuden a concretar tu idea y empieza desde ahí.
- Enfócate en uno o dos puntos clave. Piensa de antemano en los puntos que quieres destacar. No te vayas por la tangente ni te alargues demasiado, mantén tu historia fuerte y concisa.
- Practica, practica, practica antes de estar frente a tu audiencia.
- Sé agradable y carismático. Éstos son elementos importantes cuando cuentas una historia. Incluye algunos toques de humor (si va con tu personalidad) especialmente si estás tratando un tema serio. Esto ayudará a bajar la tensión frente a tu auditorio.
Un video que puede servir para aprender a ser un buen presentador: “The first 20 hours” de Josh Kaufman (con subtítulos en español):
https://www.youtube.com/watch?v=5MgBikgcWnY